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Esta es una historia feliz. Una historia de esperanza. Una historia que muestra que sí se puede salir adelante. Si bien mi vida y la de mis hermanos ha sido un poco complicada, eso no es sinónimo de tristeza. Mi nombre es Leyla, nací el 1 de marzo de 1996, mi padre Santos al ver que mi madre estaba hospitalizada a causa de una enfermedad terminal, tomó la decisión de ingresarnos (a mí y a mis cuatro hermanos) en el Hogar de niños Renacer perteneciente a los Programas Infantiles de la Asociación Brigadas de Amor Cristiano, de Honduras.

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Así comienza mi vida en el Hogar Renacer. Al poco tiempo inicio, con mucha alegría, mi vida escolar, y es ahí donde empiezan mis sueños. Con la ayuda de Alianza Solidaria, siendo una niña apadrinada del Programa Moisés, empiezo a estudiar en la Escuela Cristiana Renacer donde se me brindó ayuda para cubrir mensualidades, útiles escolares y merienda. Realizaba cartas para mis padrinos en España con mucha alegría, estuve becada mientras cursé la escuela, siendo una excelente y destacada alumna.

Recuerdo que a mis 10 años, un día tuvimos la visita en el Hogar Renacer de algunos voluntarios, entre ellos había una trabajadora social. Fascinada al ver el trabajo que ella desempeñaba, tuve mucha curiosidad por saber más. Con el pasar del tiempo tenía más claro de lo que se trataba, y me dije: “seré trabajadora social”, quiero ayudar a los niños y a las familias. Con muchos sueños y anhelos empiezo a crecer siendo una niña muy sana y amorosa con los niños del hogar y mis hermanos.

Actualmente tengo 22 años. Decidí emprender mi camino y ya no vivo en el Hogar de niños Renacer. Estudio en la universidad Autónoma de Honduras, lo que tanto había soñado, y estoy a punto de concluir mi carrera. También trabajo como maestra de educación preescolar en unos de nuestros programas sociales llamado “El Buen Samaritano”. Visito a menudo el Hogar de niños Renacer, colaboro en lo que se necesita y siempre estoy a la disposición.

Tengo muy buena relación con mis hermanos, ellos al igual que yo han salido adelante, 2 de mis hermanas ya formaron sus familias y hasta tengo sobrinos, y los demás siguen estudiando. Dios nos ha bendecido de gran manera.

Mi meta es poder graduarme en la universidad, tener un trabajo donde pueda ayudar a las familias y formar mi propia familia. Pude salir adelante gracias al cariño y al apoyo que recibí en el Hogar. Mis logros fueron posibles gracias a cada una de las personas que con sus donativos, hacen posible esta obra.8c307f d62768bf696146d086462ff826cbbaf6 mv2

Estoy muy agradecida con Dios y cada una de las personas que han formado parte de mi vida y entre ellos está Alianza Solidaria, por haber sido parte de mi educación, y por apoyarme, no solo a mí, sino también a muchos niños que han pasado por este hermoso programa y los que vendrán.

Por eso esta es una historia feliz, porque a pesar de todo, sí se puede salir adelante. Algunos ven difícil que 5 hermanos salgan adelante sin sus padres, pero nosotros creemos que sí se puede”.

La directora del Hogar Renacer comenta: «Damos gracias a Dios por la vida de Leyla, porque al contemplar cómo ha crecido y cumplido sus sueños, vemos la misericordia de Dios en todos estos años”.

Agradecemos a Alianza Solidaria por escogernos y ser parte de este ministerio que nace en el corazón de Dios, gracias por su apoyo incondicional, su confianza y amor a nuestros niños.

“En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aún a los más pequeños, a mí lo hicisteis”.

Mateo 25:40

A través del apadrinamiento, tú puedes cambiar la vida de un niño/a. Apadrina Ahora y Haz que su vida Funcione.

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