“La primera vez que visité Líbano, acudí a un campamento para niños traumatizados por la guerra en Siria. Una mañana, Halima, niña de 8 años, no se presentó al desayuno y su hermana nos indicó que estaba enferma. Al ir a verla, la niña tenía fiebre tan alta que necesitaba ser llevada al hospital. Me sorprendió que la responsable del campamento lo primero que hizo fue pedir dinero. Cuando le pregunté, explicó que para poder ingresar al hospital se requería un depósito de 1.000 dólares; de lo contrario, no serían atendidos. Finalmente, le diagnosticaron una sepsis, una infección grave que podría poner en peligro su vida.” Francisca Capa, presidenta de AS.
Pero, ¿Por qué pasa esto?
- Halima vive en Líbano, un país que enfrenta una grave crisis económica y social agravada por momentos.
- Halima es una niña refugiada siria. Es una de los 1,5 millones de refugiados que acoge el país, en su casi totalidad sirios.
- Halima es una niña invisible por causa de la guerra, porque como el 59% de los niños refugiados, no está registrada ni en su país de origen, ni en Líbano. No existe.
Situación de los refugiados sirios en Líbano
Abriendo camino: Hacia la visibilidad de Halima y otros niños invisibles