Hace algunos meses, 8 estudiantes de la escuela creada por nuestra contraparte en Haití, tras el terrible terremoto del 2010, han sido becados por una universidad en la República Dominicana, la Hope University Calvary Chapel, ¡Lo que parece muy apropiado! Este es un momento muy importante para todos los que formamos parte de este proyecto, Esperanza para Haití, porque desde el principio nuestra visión fue inspirar a los niños para que cambien el mundo, y este es un gran paso para que esa visión se haga realidad. Y también es una ocasión maravillosa para dar las gracias y celebrar con todos los que apoyáis a estos niños y niñas haitianos.
En 2010 no podíamos imaginar que algunos de los niños huérfanos y abandonados, con los que comenzamos, se graduaran en el instituto y se les ofrecería una plaza en la universidad. Porque para estos niños, el sueño de lograr una educación universitaria debe haber parecido un millón de millas más allá del reino de la posibilidad. Pero sucedió el milagro (¡ocho de hecho!).
Con el apoyo de todos, estos jóvenes han mostrado la más increíble resistencia y determinación en las circunstancias más desafiantes, superando la pobreza, los disturbios políticos, los repetidos cierres de escuelas, y más recientemente la Covid, para lograr su sueño. Seguramente ahora serán los «cambiadores del mundo» que soñamos que podrían ser. Con un título universitario, pueden llegar a ser los líderes que Haití necesita tan desesperadamente. Estos jóvenes, y confiamos en que vendrán muchos más, nos dan una esperanza real de que Haití pueda salir de la pobreza, la corrupción y el fracaso moral que ha provocado tantos problemas en los últimos años.
«Anhelamos que este pequeño paso sea el comienzo de un capítulo totalmente nuevo para esta maravillosa nación». Comenta Yrose, responsable del proyecto en Haití. Tristemente la situación del país desde hace 10 años no ha mejorado, sino empeorado. Ya hemos visto como estos jóvenes han podido cumplir sus metas en medio de la tormenta política, social, económica … pero contar con personas como tú y yo, les ayudó a no rendirse.
Apadrinar ofrece futuro a una nación ¡Apadrina ahora!
